De regreso en Perú
Hoy a horas 7:20 de la mañana pisamos suelo peruano tras haber vivido una experiencia maravillosa en la Jornada Mundial de Juventudes en Río de Janeiro, Brasil. Recordamos que en este evento participamos jóvenes del mundo entero y de nuestro país, al cual nuestro Vicariato Apostólico de San Ramón fue representado por 10 personas integrantes de la delegación 3 de nuestro país. Cabe recordar nuestra llegada a Brasil días antes de el inicio de la JMJ RIÓ 2013, nuestro comienzo como peregrinos fue en el Santuario de Nuestra Señora de Aparecida en el estado de Sao Paulo. Siendo acogidos por los religiosos Redentoristas, encargados de dicho santuario. Vivimos nuestra primera misa en Brasil, celebrado por Padre Ricardo y concelebrando Padre Leyter. Al amanecer del día siguiente partimos rumbo a Río de Janeiro para así llegar a la Parroquia Jesús Sacramentado que nos acogía por la semana de la JMJ donde las familias nos acogieron.
Nuestra JMJ empezó con una misa inaugural celebrada en las playas de Copacabana por el Arzobispo de Río Orani João Tempesta. La experiencia vivida en las catequesis de la JMJ realizadas por los obispos representantes de Bolivia, Perú y Argentina. Recordándonos la gran misión que tenemos hoy en día los jóvenes al igual que nuestro santo padre el papa francisco I nos lo volvió a recordar en cada actividad que tenía en la JMJ. En que los jóvenes somos llamados por Dios a juagar en su equipo, dar el todo por el todo y de corazón, que nosotros los jóvenes seamos testimonio para que otros jóvenes sigan el ejemplo y así evangelizar el mundo juvenil, como la misión que dio Jesús a sus discípulos, hoy también el Papa nos recuerda esa misión de ir y hacer discípulos a todas las naciones. Vivamos con la alegría de ser jóvenes y anunciemos a un Cristo vivo y resucitado, no seamos jóvenes muertos y tristes.
Después de haber vivido esta hermosa experiencia de la JMJ donde se vivió momentos de oración, Viacrucis, Vigilia y las misas donde el papa Francisco estuvo presente y de haberlo visto de tan cerca fue algo muy hermoso y difícil de explicar. Podemos decir que esta JMJ nos sirvió a muchos para ver que nuestra misión esta y que hay que cumplir lo que Cristo nos encomienda y ser sus verdaderos misioneros con nuestro testimonio, también al terminar la peregrinación y vivido toda la Jornada Mundial de la juventud de Río el Santo Padre anunció con gran alegría la próxima sede de la JMJ: Cracovia en Polonia. A prepáranos, amigos, a vivir y ser parte de la gran misión que será la próxima JMJ en Polonia e Ir y hacer discípulos a todos los jóvenes del mundo.
